Junio 13/2025, Teatro Cariola.

MARTY FRIEDMAN no necesita presentación. El virtuoso guitarrista norteamericano es una leyenda en el mundo del Metal y la música instrumental. Recordada es su participación en MEGADETH como también su temprana notoriedad en CACOPHONY, proyecto formado junto a su amigo Jason Becker, sin olvidar su fértil carrera solista, con más de una decena de discos a su haber y que lo trae nuevamente a Chile para presentar "Drama" (2024), su más reciente trabajo.

Sin embargo, esta visita es especial. Santiago no fue una simple parada en su gira sudamericana -que ya lo había llevado por Buenos Aires, Montevideo y Valparaíso- sino además fue la ciudad elegida para la grabación oficial de su próximo DVD en vivo, elevando así las expectativas entre los fanáticos locales, y les adelanto que no defraudó.

HIDALGO
Entrando de lleno a lo vivido este 13 de junio de 2025, eran pasadas las 19:30 horas y por avenida San Diego una larga fila de asistentes esperaban con ansiedad la apertura de puertas del Teatro Cariola, tanto para disfrutar del espectáculo como para refugiarse de una fría noche capitalina.

Con evidente retraso se da inicio a la jornada, y los encargados para entrar en calor fueron los nacionales de HIDALGO. Inician con "Infragilis" que logró conectar rápidamente con los asistentes, para continuar con "Sempuray", canción extraída de su álbum "Lancuyen" (2015). En este punto se debe mencionar el gran desempeño de cada integrante de la banda: Pablo Stagnaro, Angeline Bernini y Braulio Aspé comandados por Gabriel Hidalgo, que pese a la incomodidad de probar sonido frente a las miradas del público y la presión del reloj lograron entregar un sonido contundente.

La presentación de HIDALGO continuó con el tema "Garuda" perteneciente a su disco "Agnicayana" (2023), seguida de la potente "Lancuyen" para finalizar con "Vernishna". Los 30 minutos que duró su presentación fue una muestra de talento y profesionalismo que tuvo de recompensa el aplauso efusivo de los presentes, que a esa altura iban llenando el recinto.

PLASMA
El segundo número de la noche fue Claudio Cordero - PLASMA, nombre conocido por los fanáticos del Metal instrumental, escoltado en esta ocasión por Atilio Sánchez en batería y Jorge García en bajo y la ayuda de un sampler que aportó guitarras de apoyo y teclados.

Desde el primer acorde de "Cas Na Pivo" dejó claro que su guitarra Ibanez Pía (modelo de Steve Vai) sería una protagonista. Le siguió "Outatime", también perteneciente al disco "Quasar" del año 2016. Aunque el sonido presentó algunas dificultades iniciales, estas fueron superadas a partir del tercer tema, "Letting Go", permitiendo disfrutar a plenitud del talento del trío.

La interpretación de "7 días" permitió relucir unos de los sellos de Cordero, su extraordinaria velocidad, mientras que "Retrospectivas" y "Psychoswing" -este último incluido en el compilado chileno Ibanez Army del 2005- completaron un sólido repertorio. Al cerrar su show, el guitarrista agradeció el recibimiento del público e invitó apoyarlo en los Premios Pulsar 2025, donde compite como mejor artista instrumental.

MARTY FRIEDMAN
Cerca de las 22:00 horas, el escenario se preparaba para el plato fuerte, estaba todo dispuesto, los amplificadores ENGL y Peavey brillaban bajo las luces y los camarógrafos tomaban posición. Las expectativas eran altas y finalmente el silencio fue quebrado por los primeros acordes de "Deep End", tema de su álbum "Drama" (2024), seguido por "Angel". Desde el primer minuto el sonido fue impecable y la ejecución perfecta y el público, que superaban las 600 personas, lo reconoció vibrando con cada nota.

La guitarra Jackson signatura espejada de Friedman se transformó en una metralleta que disparaba ráfagas de arpegios y escalas exóticas con una deliciosa precisión. Uno de los momentos más intensos fue su interpretación del solo de "Tornado of Souls", que hizo cabecear a buena parte del público, evocando su etapa en MEGADETH.

Friedman se presentó junto a una banda integrada completamente por músicos de Japón, resulta lógico pues reside en dicho país hace dos décadas. Visualmente llamativos, con una clara influencia del estilo visual kei, destacaron no solo por su imagen y talento sino por su entrega. En particular, el baterista -descalzo e inagotable- interactuó constantemente con los fans, aportando una cuota de teatralidad. Contrastaba con la bajista, eficaz en su labor, pero se mostraba tímida.

La energética "Kaze ga Fuiteiru" elevó aún más el ambiente antes de bajar las revoluciones con una serie de baladas: "Tearful Confession", "Illumination" y "Devil Take Tomorrow". En estas piezas quedó de manifiesto uno de los sellos de Friedman: un vibrato electrizante y bendings precisos cargados de emoción que lo diferencian de otros guitarristas.

La energía regresó con la potente "Elixir" y especialmente con la majestuosa "Dragon Mistress", joya instrumental extraída de su disco debut "Dragon's Kiss" del año 1988, que despertó la nostalgia entre los seguidores más antiguos. Tras una presentación lúdica de los músicos, entre bromas y aplausos, el cierre se acercaba.

Ya pasadas las 00:00, Friedman regresó al escenario con una camiseta de la selección chilena, lo que desató la euforia de los alegres y satisfechos asistentes. En ese ambiente de conexión y emoción, dedicó la última canción de la noche, "For a Friend", a su entrañable amigo Jason Becker, entregando una interpretación conmovedora y perfecta para cerrar una jornada que quedará registrada para siempre.

El concierto fue mucho más que una noche de guitarras virtuosas. Fue una experiencia íntima tanto para los fans como para los artistas. MARTY FRIEDMAN no sólo demostró porqué es uno de los guitarristas más importantes del género, sino que también se mostró cercano y agradecido con su audiencia. Para quienes no pudieron estar presentes, solo queda esperar el lanzamiento del DVD, que sin duda capturará la magia vivida en el Cariola.

Por Felipe Pedraza U.
Fotos por Fotos Metal. (Galería completa en el siguiente link)