En exclusiva (o casi) para “TPcito”, WARCHEST nos hizo llegar su más reciente producción, titulada “Sentenced Since Conception”, y me entregaron la gran responsabilidad de plasmar mis impresiones de este, su tercer larga duración.

Tras dos portentosos trabajos anteriores ("Aftershock", 2011; "Downfall", 2015), el desafío de superarse a sí mismos podía resultar una tarea titánica; sin embargo, esa misión se finaliza con éxito gracias -principalmente en esta producción- a un verdadero arsenal de riffs llenos de vehemencia que hacen que la propuesta Thrash/Death Metal que ofrece el cuarteto te deje totalmente extasiado.

Con la clara intención de “patear culos”, los santiaguinos azotan con diez canciones que, en cierta medida, me recuerda lo expuesto por agrupaciones de la talla de KREATOR o, más principalmente, SADUS.

En cuanto escuché el primer single de la placa, “The Haunted Chapel”, me comencé a “sobar las manos”. Esperaba con ansias que la grata sensación de violencia que dejaba ese adelanto se viera replicada a lo largo de toda la producción, y sin lugar a dudas se cumple con la premisa de llevarnos a un nivel inusitado de rabia y potencia; algo mucho más notorio en comparación en sus trabajos anteriores.

Dentro de una placa con muchos matices, resulta prácticamente imposible encontrar puntos bajos. El hilo conductor de este trabajo es una espiral constante de ira que no se remite solamente al “tuca-tuca”, sino que también propone un enfoque distinto; como el mayor protagonismo que adquiere el bajo en el tema que da nombre al disco, así como también la inclusión de un piano al final de la misma, que le otorga un quiebre exquisito a la composición.

La “mala onda” de “Sentenced Since Conception” su grafica directamente en “Spiritually Death”, tema totalmente insano y creado para aniquilar, digno para el "Festival de patás en la raja" que se vivirá al escucharla en vivo. ¿Alguien dijo VIO-LENCE?

Otra destacable es “Self Executed Holocaust”, que me hizo recordar la gloriosa época del disco “Arise” con una batería que lleva el pulso de la canción con un ritmo candente y bien “vacilón”, además de unas partes de guitarra un poco más “melódicas”, muy a la onda actual.

Por otro lado, “Repulsive Existence”, es otra que también brilla con luces propias, porque a pesar de ser un corte más extenso de lo habitual, te mantiene “atenti-atenti” a la espera del ataque de este verdadero escuadrón. Acá, en el ocaso del tema, recordé un poco a TESTAMENT por las guitarras acústicas; sensaciones que vuelven a la mente de este anciano redactor.

La maduración que han conseguido WARCHEST en ya casi una década -al igual que TPcito- se logra plasmar en un trabajo correctísimo, muy bien concebido en todos sus aspectos. La mano de Arthur Rizk (quien ha trabajado con CAVALERA CONSPIRACY e INQUISITION, entre otros) se nota, ya que -como dije incansablemente anteriormente- pulió a este diamante en bruto fortaleciendo aún más ese talento que exhibieron en “Downfall”.

¿El mejor disco de Metal Nacional del presente año? Sería irresponsable de mi parte dar un sí rotundo, sobre todo si consideramos el gran nivel que han exhibido las bandas nacionales en estos últimos años; no obstante, y esto si lo podemos asegurar, estará en el podio de los destacados del presente año, quizás porque no decirlo, derechito a ganar el premio Pulsar.

Por Gustavo Maldonado G.