ABERRACIÓN, banda que me dejó gratamente impresionado con su segunda placa “Sentencia” (2017), ha publicado este año -de manera independiente- un nuevo esfuerzo titulado “Nadie está Libre”.

El sonido Heavy/Speed de viejo cuño se hace presente, esto gracias a las armonías creadas por Ignacio Norambuena en primera guitarra y el excelente complemento que encuentra en la interpretación de Andrés Espinoza en guitarra rítmica; obviamente, no se puede pasar por alto las performances de Marco Bravo en el bajo y Ronnie Rebolledo en batería. En ese contexto, el sonido de la banda me recordó grupos como BARÓN ROJO, ÁNGELES DEL INFIERNO, ACERO LETAL, MOTOSIERRA y MURO.

Interpretado íntegramente en español, esta placa contiene ocho temas, todos con una alta cuota de intensidad y con una base sólida en lo rítmico. En ese sentido, hay cortes que se llevan “el premio Choclo de Oro” como “Decepción”, que es una maciza demostración de como se debe interpretar el Heavy Metal; sus riffs tienen un sonido clásico, el cual te hace viajar en una máquina del tiempo a la década de los ochentas. En “Cegado” existen guiños a lo que hicieron los suecos HAMMERFALL en “Glory To The Brave” (1997), debido a su velocidad y a la estructura musical.

“La intriga”, que como diría Claudio Palma pone “paños fríos”, es una especie de interludio instrumental antes de volver a los sonidos más pesados que se exponen en los últimos tres cortes del larga duración, y que tiene en “Sobrepasar” su broche de oro para una buena dosis de clásico Metal.

Para finalizar, encuentro que si bien no hubo un cambio radical en el aspecto musical, las influencias que se perciben en “Nadie está libre” se amplían para acercarse a ese sonido que se podría llamar “de la armada española”. Gracias a esto, este trabajo se posiciona como una placa bien ejecutada y que a su vez puede acercar el rock pesado a las personas que recién comienzan a escuchar este género.

Por Gustavo Maldonado G.