Puta que da gusto toparse con un trabajo bien hecho. Bien pensado y, mejor aún, bien ejecutado en todo sentido. Y creo que este EP debut para los nacionales ANOMIE cumple plenamente con esta idea; desde el arte de la portada, los conceptos detrás del disco y el tremendo resultado que vemos a la hora de ponerle play a estos poco más de 20 minutos de pura calidad. El esfuerzo te atrapa en su desoladora atmósfera.

ANOMIE es una banda de post Black Metal, que nace a principios del 2020 en Santiago, pero al corto tiempo se traslada a Concepción. Acá se consolida su formación actual y se da forma "Mandragora Autumnalis". Líricamente, el disco está inspirado en el enfoque del sociólogo Emile Durkheim respecto al suicidio. La placa muestra una fusión de elementos diversos, respetando en lo posible los márgenes del Black Metal, con matices que lo acercan al Post Rock, Death Metal y breaks propios del Metal moderno.

El resultado de esta amalgama de influencias y conceptos, a juicio de este oyente, es intenso y desolador. Desde esa casi onírica intro que es "Exposure" se va percibiendo una atmósfera bien cargada de elementos oscuros, que dan rienda suelta al empezar "I".

Como ya dije anteriormente, hartos breaks modernos, harto Black y Death Metal, con pasajes de calma que no duran mucho antes de desatar los potentes riffs de las guitarras. Gran trabajo vocal se percibe también, muy buena ejecución de gritos y growls, sumado a partes vocales limpias que acompañan esta tragedia musical.

"II" y "III" continúan este viaje por la decadencia de la mente humada de manera magistral, con cambios de ritmo y cortes que te enganchan caleta a la lúgubre sonoridad de la banda, especialmente "III", que me pareció un corte a toda raja.

Honestamente, me devoré el EP y hasta me faltaron cortes para seguir deleitándome de esta propuesta musical bien concreta y potente; me hubiera gustado unos posibles "IV", "V" y "VI", antes de la llegada de "Null", que viene siendo el epílogo de este decadente viaje acompañado de litúrgicas melodías en delay. Gran trabajo atmosférico a lo largo de la placa, excelente producción y coherencia en todo momento. ¡Felicidades, cabros!

Para acompañarlo, póngale una cerveza negra y densa al lado, que haga aguante al cuerpo sonoro de este cuarteto chileno. Yo, voy por una Smoked Baltic Porter de Cervecería Fuzz. ¡A su salud!

Por Hernán González U.